Es destacable que el resto de accionistas sean en su mayoría socios de Castilla y León, siendo solo un 10% del capital externo a la Comunidad.
Tauro Sport Auto tiene su sede en Valladolid, uno de los más destacados referentes de la industria automovilística española, con la presencia de varias multinacionales del sector y del mercado auxiliar, siendo la más conocida Renault... Aunque Tauro no lleva piezas de Renault, sino de GM, pero en la capital castellana se ensamblan una a una y a mano las piezas de cada uno de los Tauro.
El V8 Spider nos retrotrae a la tradicional fórmula de motor delantero y tracción trasera que define a los roadster puros, una fórmula que siempre funciona y a mi parecer funcionará. Con un motor de GM, en concreto el del Corvette, el V8 rinde 440CV y 586Nm de par motor invirtiendo 4 segundos en pasar de 0 a 100 km/h. Como veis poner el motor de un Corvette en el chasis de un Solstice ya es una pasada, pero con un refinamiento como el de Tauro se convierte en un lujazo, no solo a nivel visual sino a nivel técnico y dinámico.
El resto de coche, aunque como decimos basado en GM y en su modelo Pontiac Solstice (que en Europa se vendió como Opel GT), tiene piezas de Selex (amortiguadores), de los valencianos Goysar (llantas), HI-Spec (frenos), Tremec (caja de cambios manual porque la automática es directamente la de GM), y DiagCar (sistema eléctrico).
Cabe reseñar esa caja de cambios manual de 6 velocidades que ofrece un rendimiento y una conducción mucho más interesante en este coche que la automática.
El diseño del coche, una vez hablado de su corazón, es como definen en Tauro muy puro y básico, un 'roadster' puro, de los de antes, con un diseño en el que destaca el afilado e inmenso morro, que retrasa al piloto mucho más allá de la línea media del vehículo, unas branquias laterales que se unen a las tomas de aire frontales y que sirven para refrigerar el V8 y, sobre todo, una espectacular trasera en la que destacan las ópticas, dos grandes focos redondos que dotan al vehículo de gran personalidad.
Y os preguntaréis cómo se comporta esta máquina. Pues según las publicaciones que la han probado sorprendentemente bien con los controles activados, ya que es noble y fácil de gestionar, pero si desconectamos y lo exprimimos a fondo, es como estar sentado en un toro bravo nunca mejor aplicado el comparativo. Cada cambio de marcha te impulsa con la fuerza de una patada y la velocidad aumenta a un ritmo casi diabólico. No en vano se declara una velocidad máxima de 290km/h.
El paso por curva es rápido pero nada sencillo, ya que la sola insinuación del gas se transmite de manera instantánea a las ruedas posteriores. Por su parte, la frenada es contundente y realmente estable. Y es que después de probar este vehículo, la conclusión es sencilla: divertido, bonito, rápido y súper-exclusivo.
Aunque los trámites de homologación parecen haber sido el cuento de nunca acabar, e incluso han lidiado (nunca mejor dicho) hasta con Lamborghini por cuestiones de uso del Logotipo, las primeras unidades de Tauro se están empezando a entregar desde finales del año pasado 2014. Ya hay dos o tres entregados en centro Europa, y aunque no tenemos datos exactos de ventas podéis ver su página web o de Facebook con las fotos de las primeras entregas.
En principio el modelo V8 es una tirada limitada a 30 vehículos, así que aún estáis a tiempo de pasar por Valladolid o preguntar precios y disponibilidad, porque seguro que podéis haceros con uno, y la exclusividad será asombrosa. Eso sí, preparaos, porque el precio del coche no es barato, son 100.000€, aunque vais a tener un coche mucho más exclusivo que cualquier Porsche o Maserati de su mismo precio.
Entre los proyectos futuros de Tauro a partir de 2015 se encuentran una versión coupé del V8, una barchetta sesentera llamada Portago y un superdeportivo que se llamará Saeta. El Coupé será una versión con techo del V8 Spyder o lo que es lo mismo un Solstice con techo pero interpretado a la manera Tauro, agresivo, diferente y exclusivo. Aunque se están desarrollando las versiones prototipo actualmente y el proceso de homologación volverá a retrasar un poco las cosas, parece ser que en 2015 se podrá ver el coche en directo.
Y en cuanto al Saeta, aún no hay mucha información, pero me recuerda a los míticos TVR pero sin los motores de TVR (afortunadamente), así que seguro que la fiabilidad y su diseño, con un poco de suerte, hará que se vendan bien en Reino Unido y resto de Europa. Para el 2015 os recomiendo seguirlos en Facebook, porque alguna sorpresa seguro que nos depararán, no os lo perdáis.
Personalmente espero que Tauro tenga continuidad en el tiempo por la sencilla razón de su tenacidad, su buen trabajo y su honestidad en el trabajo. No venden coches baratos pero tampoco venden cosas al estilo TVR o Bristol cuyo desarrollo siempre da la sensación de haberse quedado a mitad de ningún sitio. Así que lo dicho, seguiremos a esta marca de cerca.