En total Porsche hizo 91 unidades de Porsche 962 entre 1984 y 1991. 16 de ellas fueron usadas por el equipo oficial, mientras 75 se vendieron a equipos privados de todo tipo. Incluso 6 Porsche 956 fueron reconvertidos en 962.
Hoy en el mercado de Clásicos Deportivos es fácil encontrar los 962 (no en España, si en Europa central), aunque sea a precios prohibitivos (sobre los 650.000€), puesto que debido a su valor todos sobreviven. Incluso tres de ellos destrozados en carrera fueron minuciosamente reconstruidos y aún ruedan.
Sobre la historia en competición del 962 se ha escrito mucho y no lo voy a hacer aquí, hay otros blogs al respecto...¿pero y las unidades de calle?. Porsche nunca vendió este coche como coche de calle. Tan solo hizo una unidad que se llegó a registrar con matrícula alemana e incluso se llegó a probar en autopistas alemanas por la revista Auto Motor und Sport.
En realidad el coche no se llegó a vender por sus problemas de legalidad, puesto que las medidas de luces, paragolpes, etc, no cumplían las normativas mínimas alemanas. Porsche decidió no gastar dinero en un largo proceso de homologación puesto que el precio de venta sería demasiado alto para conseguir un número de ventas mínimo en un coche que no destacaba precisamente por su habitabilidad. Este coche se presupone a día de hoy a buen recaudo en la propia Porsche.
En 1994 el conductor de carreras Vern Schuppan decidió desarrollar en conjunto con la empresa japonesa Art Sports una serie especial, en principio de 50 unidades, de un 962 basado en el de competición pero para poder usar en calle.
Para poder hacer estos coches se usaba como base los 962 estándar que Porsche fabricaba para el campeonato IMSA GT, aunque con ligeros cambios. El coche, de tan solo 1.050kg posee un bóxer de 6 cilindros con doble turbo KKK y una caja manual de 5 relaciones. Rendía unos 600CV a 7.000rpm y un par de 662Nm a 6.800rpm, dando una velocidad punta cercana a los 350km/h. El chasis y la carrocería (rediseñados por Mike Simcoe de Holden Australia) las desarrollaba Art-Sports directamente en Inglaterra, ensamblando el coche con el motor y demás elementos directos del Porsche IMSA GT.
A pesar de que la idea inicial fue vender como he dicho 50 unidades a un precio de 1,5millones de dólares USA, la realidad fue más cruel. La primera unidad se vendió sin problemas por 1,9 millones de dólares pero el resto de unidades construidas estaban gafadas. Dos se enviaron a Japón y no se pudieron cobrar, y las otras se vendieron pero al final los costes se habían disparado tanto que se paró la construcción y Art-Sports & Schuppan se tuvieron que declarar en bancarrota. Solo hay 6 unidades CR terminadas hoy en día, las cuales rondan unos precios de 2,5 millones de dólares USA. Tras las unidades CR se hicieron dos más de competición, de la versión 962R. Una de ellas pasó a ser también de calle tras modificaciones en los propios talleres de Schuppan. Es el llamado Schuppan 962/123 que es reconocible como pieza única pues tiene una banda frontal en que pone “962R Le Mans Prototype”. La diferencia con las demás versiones es su chasis de panel de abeja realizado en aluminio. Luego hay 1 unidad de calle más tipo 962LM, en total 7 unidades Schuppan 962 de calle.
En 1991 Koenig Specials, el gran preparador alemán de los 80, creo una réplica del 962, el llamado C62, creando uno de los coches aún hoy en día más rápido de todos los tiempos.
Koenig, que se había hecho famoso por sus preparaciones de superdeportivos y sobre todo por su Testarossa de 1.000CV, decidió lanzar una serie limitada del C62 para terminar de ganar fama mundial a golpe de coche espectacular.
El C62 contaba de nuevo con un 6 cilindros bóxer de 3.368cc, obteniéndose del mismo 750Nm a 4.500rpm y cerca de 800CV a 6.300rpm. El resultado en carretera era brutal, con una velocidad máxima de 381km/h, una aceleración 0-200km/h de 9.9 segundos y todo ello por 450.000€ de nada. Casi como el original, pero de calle.
El interior y el exterior estaban igualmente cuidados para ser cómodo y sobre todo legal y poder ser conducido en ciudad, si te lo permitían los bumper de la urbanización. Una bestia que hoy en día puede sacar los colores a cualquier Lamborghini, Pagani o Koenigsecc.
Actualmente se desconoce el número de unidades entregadas, pero no se cree que sean más de 6 o 7.
El preparador alemán DP Motorsport, famoso por sus preparaciones de altas prestaciones en Porsches, realizó en 1992 una serie de 3 unidades del DP 962, basándose también en los chasis del 962. Fueron los primeros en hacerlo, concretamente en 1990.
En un tiempo record de 6 meses de desarrrollo, consiguió las especificaciones básicas para poder circular en calle más el desarrollo del bóxer 3.3 con doble turbo.
El coche rendía aproximadamente unos 850CV y tenía un par declarado de 881Nm a 4800rpm, alcanzando los 345km/h como velocidad oficial.
En 1994, Dauer, la marca del famoso corredor Jochen dauer, realizó una serie especial del 962, el Dauer 962 Le Mans, que es quizá el más famoso de los 962 de carretera por ser el más numeroso, pues de él se vendieron 12 unidades.
Utilizó el chasis de carreras original para sus versiones GT1 del 962, tanto para carretera como para competición. La carrocería era nueva, aunque conserva muchos elementos de los 962s originales, pero estaba completamente hecha de fibra de carbono.
Contaba con dos asientos de cuero e incluso con pantalla para DVD, pero bueno dejando de lado esos detalles, el motor era otra vez el archiconocido 3.0 boxer de 6 cilindros del Porsche 935, con doble turbo y caja de cambios de 5 velocidades, entregando 730CV.
Otros que intentaron vender el 962 mediante una serie limitada de varias unidades pero fracasaron en el intento fueron los amigos de Dyson Racing en USA. Inicialmente se hicieron con un 962 para correr en el IMSA GT, pero los planes salieron mal y decidieron intentar hacer negocio con el coche haciendo del mismo una unidad de calle, para ver si podrían hacer dicha serie especial sin problema y venderla a un buen precio. Al final la unidad que veis en la foto es la única disponible que se terminó.
El motor de dicha bestia del asfalto es un bóxer 6 cilindros 3.6 proveniente de un 911/993 GT2, que entrega 580CV con un par de 740Nm a 4900rpm. Su peso es de escasos 900kg, lo que convierte el coche en un misil.
- 90 unidades originales de Porsche 962 de competición.
- 1 unidad de los 91 originales fue convertido a unidad de calle, el 962 Derek Bell.
- 1 unidad de calle de Porsche AG.
- 6 Porsche 962 de competición que son conversiones de 956 a 962.
- 12 unidades Dauer 962.
- 6 o 7 unidades de Koenig C62.
- 3 unidades de DP 962
- 7 unidades Schuppan 962.
En total, un coche espectacular, carismático, conocido, escaso, difícil de ver, y carísimo de mantener así como de adquirir, aunque las últimas intentonas de vender unidades 962 de calle en subastas han sorprendido por su precio a la baja. Supongo que son coches poco racionales y complicados de vender en un futuro, con lo que el mercado los castiga, pero a mi me parece que un 962 de calle siempre hará girar la cabeza más rápidamente que un Lambo Aventador o similares.
Una historia de un coche de competición histórico.