Entre los casi 100 pequeños Seat había bastante variedad y se podían contemplar ejemplos de todas las versiones comercializadas, destacando por su rareza alguna unidad del 800 (600 con 4 puertas), Formicheta (600 transformado en furgoneta), la versión deportiva Abarth o incluso un 600 transformado en coupé carrozado por Serra.
También destacaron por su curiosidad un 800 taxi, un antiquísimo 600 usado como coche de autoescuela o un auténtico prototipo de competición con tal nivel de modificaciones que incluso sus puertas eran de apertura de ala de gaviota…
El 600 fue un automóvil fabricado por SEAT desde 1957 hasta 1973 bajo licencia FIAT sobre el original FIAT 600. Durante estos años se produjeron casi 800.000 unidades en total repartidas en 4 versiones: 600 Normal, 600 D, 600 E y 600 L, siendo la más vendida el 600 D. El “padre de la criatura” fue el diseñador italiano Dante Giacosa, y la idea era crear un pequeño utilitario con 4 plazas fiable, sencillo y barato con el que motorizar a una incipiente clase media que hasta entonces se movía mayoritariamente en moto o incluso bicicleta.
Creo que no es necesario añadir que la idea fue un tremendo éxito desde el principio y la lista de espera llegó a ser de ¡dos años!
El final del 600 vino provocado principalmente por la aparición de nuevos competidores más modernos que lo superaban en muchos aspectos y por el lógico desgaste de un vehículo que estuvo 16 años a la venta sin cambios significativos.
Haciendo un rápido repaso, las principales características técnicas del 600 son:
-Motor trasero longitudinal de 4 cilindros y tracción trasera.
-Cambio manual de 4 velocidades, con la 1º sin sincronizar.
-Suspensión independiente con ballesta transversal delantera.
-Frenos de tambor en las 4 ruedas.
-Dimensiones de 3,3 m. de largo, 1,4 m. de ancho y 1,35 m. de alto, con un peso que ronda los 700 kgs.
-El 600 Normal y el D montan las llamadas “puertas suicidas” o también conocidas como “mirabragas”, esto es, de apertura contraria a la habitual. El 600 E y L ya equipan las puertas de apertura en el “buen sentido”.
-El motor del 600 Normal es de 633 cc. y a partir del D se aumenta la capacidad hasta los 767 cc. La potencia se mueve desde los 21 cv. originales hasta los 32 del motor más evolucionado. La velocidad máxima oficial nunca superó los 120 kms/h.
-Aparte de las 4 versiones ya comentadas existieron otras variantes derivadas del 600, entre los que cabe destacar el 600 descapotable con techo de lona; el 800, que es un 600 con la carrocería alargada y 4 puertas; el Formichetta, un 600 convertido en una pequeña furgoneta y el 600 comercial, que tiene 2 plazas sin asientos ni cristales traseros; aparte de una multitud de transformaciones de preparadores privados como Serra o Siata.
Como conclusión, y más allá de cualquier frio dato técnico, no hay duda de que el pequeño “Pelotilla” es el coche más querido y reconocible de cuantos han circulado por este país. El 600 dejó de ser un automóvil para convertirse en un mito, una parte de la historia reciente de España y un fenómeno social de masas que resulta imprescindible para entender nuestros orígenes automovilísticos.
Como reza la famosa pancarta que acompañó a la última unidad producida… “NACISTE PRÍNCIPE Y MUERES REY”