1971 ALFA ROMEO CAIMANO
Presentado como prototipo en el Salón de Turín en 1971 se trata de un modelo diseñado por Giorgetto Giugaro, alma de Ital Design. El ejemplar es único y se exhibía en el Museo Storico Alfa Romeo.
Con un 4 cilindros bóxer de Alfa de tan solo 1.186cc y una potencia de 64cv, estaba basado en el Alfa Romeo Alfasud. Con tracción trasera y caja manual era por tanto un pequeño ejercicio de estilo al más puro estilo Alfa en cuanto a motor pero con un diseño tan extraño como rompedor, con una delantera muy alargada y un extraño cristal delantero que permitía una visibilidad excepcional.
Pininfarina recibió 3 Alfa Romeo 33 Stradale. Uso uno para hacer el Carabo, otro para el Alfa 33.2 y otro para el P33 Roadster GS, que más tarde se convertiría en el Cuneo. O sea que es el mismo coche como explicamos en el capítulo anterior. El Cunoe era una extrañísima barqueta de líneas rectas presentada en el Salón de Bruselas de 1971 hecha con el propio P33 Roadster GS como base. Si los dos primeros, el 33.2 y el P33 Roadster G.S. ya dieron que hablar, el Cuneo se presentó encima de un color blanco con rayas naranjas para darle más notoriedad y vaya si lo consiguió. Era en realidad una evolución, a mejor, del P33 Roadster aunque mantenía todas las características mecánicas del Alfa 33 original.
En 1972, para reemplazar el por entonces anticuado Alfa Romeo Spider, Pininfarina planea aprovechar la plataforma del Alfetta para crear un coche nuevo, el Alfa Romeo Alfetta Spider, que esta vez sería en realidad una especia de targa con techo desmontable. El coche se presentó por primera vez en el Salón de Turín en 1972, en amarillo, para ser posteriormente repintado en rojo Alfa.
La base es como decimos del Alfetta convenientemente adaptado a la nueva carrocería, con su motor 1.800 cc de 122 CV.
El coche estuvo a punto de ser llevado a la producción pero cuando tenía todos los papeles en regla para reemplazar al Spider la falta de fondos en Alfa Romeo hizo que la dirección apartara el proyecto. El prototipo se encuentra ahora cogiendo polvo en el paradero desconocido ahora mismo de la colección del Museo Storico.
Algo indiscutible es la influencia de este prototipo en diversos modelos de diferentes marcas, como el FIAT X1/9, el Triumph TR7 o el AC 3000ME.
El Alfa Eagle de Pininfarina fue un extraño proyecto de coche descapotable con barra antivuelco incorporada que se basaba en el chasis y la mecánica del Alfa Romeo Alfetta GT. El porqué de este extrañao concept car fue el demostrar fehacientemente la posibilidad de construir un vehículo Spider con un nivel de seguridad similar, o casi, al de un vehículo cerrado habitual. El incremento de las regulaciones de seguridad en diversos países como Estados Unidos de un modo casi exponencial había logrado que la creación de nuevos cabrios se viese casi parada en su totalidad.
El Eagle tenía una barra antivuelco que recorría el coche por los laterales de modo que creaba un sistema lateral de protección además de ejercer como barra antivuelco clásica.
El coche estéticamente no era muy agraciado comparado con otros Alfa de la época, pero resultó ser una eficaz demostración técnica. Tenía un motor 1.8 de 122cv con caja manual de 5 velocidades. También es un ejemplar único perteneciente a la colección del Storico.
El Alfa Romeo Navajo fue un famosísimo prototipo presentado en Ginebra en 1976. Basado, como no, en el 33 Stradale, y con su pequeño V8, el Navajo tenía una peculiar carrocería futurista hecha de fibra de vidrio lo cual le hacía muy ligero, tan solo de 870kg.
Empezando por el frontal, lo primero que llamaba la atención era su afilado aspecto, compensado por un spoiler delantero, encargado de gestionar cuánto aire pasaba por debajo del coche y cuánto se dirigía a la zona superior. Dicho faldón se autoajustaba de manera electrónica en función de la velocidad. Los faros delanteros eran retráctiles pero no de un modo llamémosle “normal”, sino que estaban situados en un lado y se abrían desde allí.
El coche era verdaderamente espectacular, con la rueda trasera carenada parcialmente, con la luna delantera panorámica y con una trasera que tenía una fila de faros en línea recta que le daba un aspecto muy particular.
Por dentro, Gandini buscó reducir elementos y peso, con lo que los dos asientos también estaban hechos en la propia fibra de vidrio. El cuadro de relojes y el diseño del salpicadero eran más sencillos aunque también originales.
En su presentación el público quedó impresionado, aunque ya hubo alguna voz discordante que lo acusó de exagerado y de coche de película de ciencia-ficción. Este coche, ejemplar único, descansa hoy en día en la colección privada del Museo Storico Alfa Romeo.
Giorgetto Guigaro presentó en 1976 este proyecto de Taxi para Nueva York a partir de una invitación del Museo MoMA de Nueva York. El Museo de Arte Moderno de Nueva York hizo una especie de “concurso de diseño” al que invitó como firmas principales a Volkswagen, Volvo, American Machine & Foundry y Steam Power Systems, pero también se invitó a otros diseñadores famosos. Entre esos invitados estaba Italdesing.
Basado en la plataforma rodante del Alfa Romeo Alfasud y de la furgoneta Alfa Romeo F12, el coche en si tiene un motor 1.3 de gasolina, con tracción delantera y suspensión independiente frontal y trasera. El coche es pura funcionalidad sin complejos, sin aditamentos deportivos de ningún tipo debido a que el MOMA lo que quería es que se hiciera un estudio sobre el transporte público, siendo el coche un taxi para 5 personas más el conductor más espacio de sobra para equipaje y todo ello en un espacio de sólo 4 metros de longitud, todo un logro, sobre todo si lo comparamos con los Taxi Checker de los años 80, bastante más grandes.
Incluso poseía una plataforma para entrar con sillas de ruedas, adelantándose a su tiempo al eliminar estar barreras para discapacitados físicos. Pero… ¿por qué se presentó como Alfa Romeo? Simplemente porque la plataforma era Alfa Romeo, que fue la que se prestó a ofrecer su furgoneta como base para el proyecto.
El proyecto de Guigaro impresionó al gran público, no sólo al MoMA, incluso al ayuntamiento de Nueva York, pero sin un concurso abierto para obligar a las compañías de Taxis a cambiar de modelos, y con una Alfa Romeo nada interesada en intentar homologar el vehículo como Taxi en Nueva York (ni como Alfa Romeo en sí), Giugiario se tuvo que conformar con ser el “ganador moral” del concurso sin llegar a producir el coche. Eso si, lo aprendido y aplicado en este coche se desarrolló después en el Lancia Megagamma pero este tampoco llegaría a ningún sitio. Todo lo innovadora que era la industria del automóvil italiana en los 30-40-50 lo perdió después, y ninguna de las marcas italianas se atrevió a producir un monovolumen…hasta que llegó Renault y lanzó el Espace.
Hay en día los taxis “oficiales” de Nueva York son Nissan NV200 (casi 30 años después ha ganado la lógica), mientras en 1976 había 16 vehículos diferentes homologados como taxi aunque casi todos eran Checker.
El Alfa Romeo Capsula es un horroroso concept de 1982. El Capsula se basa en el Alfa Romeo Alfasud con su motor de 1.490cc bóxer situado bajo el capó. El coche parecía en su momento muy futurista y fue un anticipo de la moda de los monovolumen. Si bien es cierto que el cohe era de nuevo útil y funcional como características principales, el diseño exterior era más bien lamentable y más siendo un Alfa Romeo (o al menos presentándose como tal).
La gracia del vehículo era su gran facilidad para adaptarse a cambios en la carrocería, pudiéndose cambiar de monovolumen en furgoneta, ambulancia o vehículo comercial en cuestión de minutos, y todo ello con una longitud máxima de 3.720mm. Este ejemplar único está guardado en los talleres Ital Design.
En 1983 en el Salón de Ginebra, Zagato presentó en colaboración con Alfa Romeo el Zagato 6, un original coupé de tres volúmenes que sirvió para dos cosas. La primera fue para que Zagato, que llevaba unos años de capa caída haciendo blindajes en coches para no caer en la quiebra, volviera a erguir la cabeza por un diseño que fue ampliamente aclamado por su originalidad. La segunda fue para ver que Alfa Romeo estaba prácticamente en la quiebra y dirigida por patanes. Dichos patanes prefirieron lanzar al mercado el infame Arna que lanzar el Zeta 6, que hubiera sido a mi parecer un coche más Alfa y más decente a los ojos de los Alfistas y no Alfistas.
El caso es que el Zeta 6 era original, con un pilar que recorría la línea trapezoidal de puertas y que terminaba en una ventana trasera panorámica oblicua.
El Zeta 6 tenía una carrocería de aluminio con zonas de plástico deformable que pintado del mismo color de la carrocería no se diferenciaba del resto. Los grupos ópticos traseros se tomaban directamente de un BMW Serie 5. Una característica especial del Zeta 6 era el extraño mecanismo de apertura de la puerta. En lugar del tirador convencional tenía una especie tenía 6 placas circulares giratorias donde se encajaban los dedos. El chasis y motor del Zeta 6 procedían del GTV6 Alfetta. Los componentes técnicos se mantuvieron sin cambios.
Zagato presentó en 1982 sus dos copias de Zeta 6, las cuales fueron mostrados en el Salón de Ginebra 1983. Fueron los dos únicos coches construidos del Zeta 6, porque la tercera unidad se quedó en la carrocería y nunca se completó.
Actualemente el paredero de estas 2 unidades y media es conocido. Una está en el Museo Storico de Alfa, otra en manos de Corrado Lopresto, un coleecionista italiano que tiene varios Alfas, Lancias y FIATs únicos, y la carrocería que nunca fue montada está en manos de un coleccionista holandés.
El Delfino se presentó en el Salón de Ginebra de 1983. Con el ánimo de presentar un nuevo coupé de altas prestaciones al estilo del FIAT 130, Alfa encomendó a Bertone este diseño de líneas cuadradas. La mecánica era una Alfa V6 de 2.5 litros y 190cv.
Su pureza de líneas siempre fue alabada, e incluso se rumorea que copiada por Zagato en el Aston Martin V8 Zagato. Quizá sí, pero me parece a mí que Zagato tampoco es que tenga falta de imaginación. El prototipo Delfino es único y no he logrado saber si actualmente está en el Museo Bertone o en el propio museo Alfa Romeo de Arese.
Aun me pregunto quien demonios llamó al original Alfa SZ30 “Il Monstruo” cuando este trasto si es completamente merecedor de tal apodo. Este engendro salido de los lápices de Zagato fue un ejercicio de estilo presentado en Ginebra en 1984 con el fin de crear un coche útil de diferentes funciones, con mucho espacio interior y tracción a las cuatro ruedas. Hoy en día, esto es lo que llamamos un SUV.
El Tempo Libero se creó sobre la base del Alfa Romeo 33 1.5 Quadrifoglio Oro. Si al 33, que no es que fuera demasiado agraciado para mi gusto, le hacemos “monovolumen” obtenemos esto, el Tempo Libero, que gracias a su pequeño tamaño y las 3 puertas aun resultaba más ridículo. Eso sí, la utilidad no se discute, pues cabían seis pasajeros sin problema, y los asientos se podían desmontar, girar, etc.
Sin embargo hay que reconocer que el coche, a pesar del rechazo frontal de la gente que lo vio en Ginebra, fue pionero en varias cosas, como el concepto del SUV en un coche relativamente “producible” o en montar un sistema de tracción híbrido, pues montaba aparte del 1.5 de gasolina un pequeño motor eléctrico que impulsaba el eje trasero. Era así como conseguía la tracción total. Existen 2 únicas unidades de este vehículo, una en rojo y otra en color oro. Ambas están guardadas bajo llave en los Talleres Zagato.
El Alfa Romeo Vivace fue una maqueta de Alfa Romeo diseñado por Pininfarina y presentada en Turín en 1986. Se realizaron dos tipos de carrocería, un spider y un coupé, pero ambos modelos eran madera y chapa, por lo que estos coches, propiamente hablando no son más que unas maquetas.
La idea detrás del estudio de diseño fue crear entre el spider y el coupé una intercambiabilidad entre las piezas de chapa. Esta idea innovadora se aplicó sasi diez años más tarde entre el Alfa Romeo 916 Spider y el Alfa Romeo GTV. El diseño del frontal se usó años después en el nariz se verá más adelante en el Alfa Romeo 164.